Atamisqui, un pueblo de enamorados (Por Daniela García)

Daniela García viajó a Villa Atamisqui, situado al sur de Santiago del Estero, y entrevistó al intendente Roberto Brandan. Por esos pagos, el kirchnerismo consiguió el 93.25 por ciento de los votos. Llegamos a la hora de la siesta. La mayoría de los almacenes estaban cerrados, salvo dos. Pregunto en el primero si venden agua, es agosto pero ya se siente el calor santiagueño, el almacenero me recomienda que vaya al quiosquito de al lado. “Las botellas que yo tengo están tibias”, me advierte. Toco timbre en la despensa que le sigue, consigo mi bebida y escucho: “Comentan que acá dormimos mucho pero ni la Cris querría caminar a las tres de la tarde bajo este sol”, dice y sonríe. No hace falta otro guiño más. Villa Atamisqui es el pueblo agropecuario, ubicado al sur de Santiago del Estero, donde el kircherismo obtuvo su mayor victoria: el 93,25 por ciento de los habitantes votó la fórmula Cristina Fernández–Amado Boudou en las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) del pasado 14 de agosto. Casi todos la eligieron. La mesa ya estaba lista, empanadas caseras primero y un concierto de Elpidio Herrera y sus Sachaguitarras, después, era la bienvenida que el Intendente Roberto Brandan había preparado para recibir a las decenas de militantes, convocados por el Colectivo político-cultural Casa Latinoamericana, que se acercaban a conocer la “Nueva Capital K”. Entre zapateos y nubes de tierra, el dueño de casa compartió su alegría tras el triunfo electoral. “Este porcentaje es el resultado de acompañar a la gente en la vida cotidiana. Como católico tengo como consigna dar la vida, ponerme al servicio de los demás. Nuestro equipo es de doce concejales que también ejercemos la docencia. Somos militantes políticos haciendo gestión pública”, predica. Para Brandan, el gobierno kirchnerista devolvió al pueblo su dignidad: “Muchos han cantado la marcha peronista pero hicieron cualquier cosa menos justicia social. Sigue siendo cierto que Néstor (Kirchner) sostuvo sus convicciones al ingresar a la Casa de Gobierno, que Cristina (Fernández) las siguió manteniendo y que se han hecho acción”. “Hoy, como nunca antes, nuestros abuelos cobran una jubilación y todos los años reciben dos aumentos. Tienen dignidad, independencia y libertad”. Así, reconoció también el avance hecho en materia de igualdad social tanto hacia las mujeres como a las personas con capacidades especiales. “Como dice nuestra Presidenta, para el derecho no hay techo. Actualmente, quienes tienen dificultad reciben apoyo de este gobierno. Como las madres cobrando la Asignación Universal por Hijo y los discapacitados, que han logrado mayores pensiones. Estos son actos evidentes de justicia social”. “Con la música de Elpidio como bandera; rescatando nuestra cultura, el idioma quichua; cuidando a las teleras, sintiendo orgullo de aquello que somos, seguiremos adelante para hacer de Atamisqui un municipio diferente”, dijo y luego se despidió, enamorado de su pueblo.